No todas las personas saben que el Sol puede aportarles una de las vitaminas más esenciales para el organismo, por lo que tampoco conocen realmente sobre sus beneficios para el cuerpo.
Por eso, a través de este post estaremos enfocándonos especialmente en esa vitamina que aporta el sol, señalando no solo cuál es y cómo tomarla, sino también sus beneficios y mucho más.
¿Qué vitaminas ofrece el Sol?
Por lo general suele ser muy común escuchar acerca de los problemas que pueden originarse como consecuencia de tomar el Sol constantemente; sin embargo, el exponernos a la luz solar de forma controlada puede resultar sumamente beneficioso para la salud.
Todos en alguna ocasión, hemos oído hablar sobre los beneficios que el sol tiene no solo en los niños, sino también en las personas adultas.
Y esto se debe precisamente a que el Sol es capaz de proporcionarnos una vitamina de gran importancia para nuestro cuerpo, la vitamina D, la cual resulta fundamental, especialmente en el caso de los niños, debido a que les permite fomentar el desarrollo de sus huesos.
La vitamina D
La vitamina D se caracteriza por ser aquella cuya función consiste en regular los niveles tanto de fósforo como de calcio presente en la sangre, fomentar la formación y la mineralización de los huesos, influye sobre el sistema autoinmune y diversos procesos fisiológicos, e incluso evita el desarrollo de trastornos cognitivos, incluyendo el Alzheimer, por ejemplo.
Además de lo anterior, la vitamina D también es la encargada de absorber el fósforo y el calcio presente en los alimentos mediante la acción de los intestinos, para después absorber el calcio mediante los riñones.
Esto supone un proceso bastante complejo, de modo que sería posible señalar que esta vitamina se encuentra dentro de las más necesarias e importantes para el organismo.
¿De qué forma tomar sol con el fin de conseguir la vitamina D?
El cuerpo humano es totalmente capaz de sintetizar la vitamina D que se encuentra activa en la piel, lo cual hace a través del colesterol y mediante la acción de la luz solar, sin embargo, para poder obtener esta vitamina del Sol, es importante saber no sólo cómo, sino también cuánto sol tomar, por eso lo explicamos a continuación:
Para poder obtener vitamina D del Sol, solo será necesario que nos expongamos a luz solar alrededor de 10 minutos, una 3-4 veces por semana, de manera que el organismo pueda sintetizar el aporte que requiere de dicha vitamina.
Esta exposición al Sol debe realizarse sin el hacer uso del protector solar, debido a que los rayos ultravioleta que requiere nuestro organismo para conseguir activar la vitamina D, consisten en los UVB, y únicamente el 5% de ellos se obtienen a través del Sol, dado que la mayor parte de los rayos solares suelen ser UVA, es decir, aquellos que broncean.
Y los protectores solares impiden directamente la absorción del organismo de los rayos UVB.
Es importante evitar tomar sol sin protector durante un tiempo mayor al recomendado con el propósito de conseguir más vitamina D, de lo contrario, el riesgo de desarrollar cáncer de piel podría ser mayor.
Es importante que complementemos la exposición al sol a través de la ingesta de diversos alimentos que tengan un alto aporte de vitamina D3.
¿Qué alimentos ofrecen vitamina D?
Una equilibrada y variada alimentación nos permitirá conseguir el aporte diario que el organismo requiere de vitamina D. Así, dentro de los alimentos que ofrecen un buen contenido de esta vitamina se encuentran los siguientes:
- Champiñones y setas.
- Mariscos y pescados, sobre todo el pescado azul (atún, salmón, sardina, caballa, trucha, etc.), las ostras y las gambas.
- Productos lácteos, incluyendo la leche de almendras y la de soja, al igual que el queso tierno.
- Asimismo, hay una variedad de alimentos que refuerzan la presencia de esta vitamina dentro de sus componentes, como por ejemplo, los zumos, yogures y cereales.
Los beneficios de la vitamina D
Además de tener una gran importancia para todo aquello que hemos señalado previamente, la vitamina D también cuenta con otros beneficios sobre el organismo; en este sentido, es preciso mencionar que ayuda a disminuir el riesgo de padecer diversos tipos de cáncer, incluyendo el cáncer de próstata, colon o mama, por ejemplo.
Para terminar podemos decir que en resumen, la exposición al Sol resulta esencial para nuestro cuerpo, sin embargo, es preciso exponernos de manera moderada, usando protector solar durante las horas de mayor Sol para evitar un bronceado excesivo y también las quemaduras solares.